Tantas cosas nos pasaron en estos años, me hiciste recorrer de la mano los mas bellos prados floridos en la más absoluta paz del paraíso que creaste para mi. Podía ver cada cosa buena que me ofrecía la vida, cada detalle que se cruzaba en mi existencia tenia sentido, fue maravilloso sentirte a lado mío mientras descubría más y más la capacidad divina que tiene el corazón para amar, para sentir amor, para vivir...
Recuerdas como reíamos sin motivo aparente? Ahora se que el único motivo de esas risas era el expresar nuestra completitud en este mundo, nos sentíamos tan bien, sin pesares, sin culpas, emocionados, perdidos en nuestros ojos, riendo de felicidad y tranquilidad.
Los problemas de toda nuestra vida simplemente desaparecían y todo estaba bien mientras estemos juntos... tu bailando sobre mis pies, tu bailando en mi alma, enmarañando tus brazos con mi alma, alimentando el fuego de mi urgente animo de hacerte mía, de tomar tu esencia y fundirme a ella.
Fueron tantas cosas, el martilleo de tu salvaje corazón a punto de escapar de tu cuerpo mientras te robaba un beso recostado a lado tuyo, dándonos vida, dándonos fuerza para seguir adelante con nuestra única, terrible y hermosa manera de amarnos en un universo que se empeñaba en separarnos.
Tu compañía es uno de mis tesoros queridos, porque caminar de la mano de la persona que sabes que es para ti me provocaba un estado de gracia tal, que sonidos, olores, sabores y la vida misma se desvanecían, pero siempre caminábamos sin rumbo, sin medir consecuencias sin pensar en nada más que en nosotros, lo único que necesitaba para seguir adelante era sentir la tibieza de tu mano, recuerdo que una vez nos perdimos en esa ciudad donde me robaste un beso mientras la cena estaba en la mesa. Momento increíble e inesperado para mi, sentí que el alma se había quedado hablando mientras mis labios eran besados por dos pétalos de rosa. Se me voló la mente y fui rodeado de tu luz, solo alcance a ver tus ojos cerrados, tu rostro en total calma y absoluta entrega, tus manos sujetando mi faz con maternal cariño, con apasionado sentimiento, solo entonces cerré los míos y disfrute de lo que llaman como felicidad. Segundos perfectos, segundos en divinidad, segundos en comunión de nuestras almas. Ahora que recuerdo todo esto vuelvo a sentirte a lado mío y solo quiero regresar el tiempo y no soltarte nunca más para beber de tus labios siempre.
Siempre aprendiendo cosas nuevas de nosotros, me enseñaste tanto, ya no soy tan obstinado y soy más tolerante, y tu ya tienes un poco menos de miedo a las alturas, recuerdas el viento frío golpear tu cuerpo mientras te sujetaba por la espalda en esa tarde increíble? pudiste ver abajo porque confiaste en mi, te lo agradezco tanto. Recuerdas ese día? Ese día pudiste volar un poco, y te elevaste sobre aguas congeladas, nadaste en mi alma rodeada de agua azulada y cristalina. Ese mismo día nos tomamos de la mano y saltamos juntos y al mismo tiempo, jugamos como niños inocentes y todo me parecía increíble, todo se veía tan diferente cuando estabas a mi lado. Y pintaste mi niñez actual del color de la felicidad cuando conociste el lugar donde solía ir de pequeño y era todo tan simple que era tan feliz, me devolviste esa felicidad esa tarde, esa que había olvidado hace tanto tiempo.
Me enseñaste a tener coraje y a no rendirme, me enseñaste a resistir, que la esperanza quizá sea lo ultimo que se pierde, pero que es lo más importante en nuestras vidas. Casi morí en uno de los tantos viajes que hice por ti, sabia que podía ser así, sin embargo no me importo, porque me enseñaste a ser valiente, porque te necesitaba y te necesito en mi vida, lo arriesgue todo y esa vez solo unos pocos segundos pudieron haberme alejado para siempre de ti, pero veo ahora que no hay diferencia con el día de hoy, como aquella vez no me importó morir por ir a tu encuentro, ahora no me importa hacerlo por tenerte a mi lado, después de todo jamas tuve nada que perder si se trataba de tener tu amor.
Los momentos malos también nos provocaron tantas heridas, tantas lágrimas derramadas por cosas que no quiero recordar... y muchas de las tuyas fueron por mi culpa, cosas que no puedo arreglar ya, aun así siempre me sentí en deuda por cada una de tus lagrimas... con todo mi sentir te pido perdón, perdón por mi obstinación, por mi intransigencia, perdón por mis imposiciones por mi cobardía, disculpa mi ausencia en cada instante en que debí haber estado a tu lado, me duele en lo profundo de mi no haberte ayudado, apoyado, cuidado, alegrado, amado en los momentos más difíciles de tu vida, hasta mi ultimo día sentiré que fallé terriblemente por no estar a tu lado ese fatídico día, espero encontrar tu perdón alguna vez, porque yo no me lo perdonare nunca, porque les falle a ambas de la manera más cruel y estúpida.
Nuestras ausencias siempre fueron terribles, el dolor y la desesperación fueron compañeros inseparables para mi cuando no sabia nada de ti, cuando me dejaste tantas veces, he aprendido a soportarlos porque aún te veo llegar aquí y aún nos veo juntos como antes, siendo más felices que nunca.
Tantas cosas nos pasaron que es imposible recordar todo. Tantos años, tanto amor, tanto cariño, tantas lágrimas... tanta vida y seguimos aquí, muy lejos el uno del otro, pero con la mente y el corazón siempre en el otro, negando o aceptando, luchando o resignando, viviendo o muriendo.
No te olvido jamás y no quiero hacerlo, renunciar a ti seria el suicidio... no tenerte y luchar por lograrlo también lo es y no me importa, después de todo siempre la muerte triunfa al final. Solo se que si tu no estas en mi vida prefiero morir rápido. Si tu no estas, nada tiene sentido.
Y es el primer 29 que no puedo decirte felicidades amor mio, pero no olvides ni hoy ni nunca que te amo, que te espero y que te sueño siempre.
El amor que te tengo es igual de grande que el dolor de no tenerte. Te amo mi Luna y mis estrellas.
"Y me basta con saber que estas ahí... pensando un poco en mi... has hecho con mi vida lo que a ti te dio la gana... tal vez no exista nada que me duela mas que tu"
